Las pintadas con aerosol y los daños al patrimonio histórico recrudecieron en las últimas semanas en la ciudad de Chascomús. Éstos delitos se ven favorecidos por la impunidad de la madrugada y la inacción de las autoridades respectivas en la gestión del intendente massista Javier Gastón.
Vecinos de la plaza Gouaillard vienen denunciando desde hace algunos años que ése sector cercano al centro de la ciudad es víctima de roturas en bancos de cemento. También sufrieron pintadas con aerosol las paredes de la Escuela 1 “Bernardino Rivadavia” que es una de las más antiguas del país.
Sobre la vereda de la propia intendencia se encuentra una placa que recuerda el bicentenario del sistema de cooperadoras escolares que tuviera su origen en Chascomús. El vidrio que protege dicha placa fue destrozado a piedrazos.
Justo enfrente al Palacio Municipal se encuentra Plaza Independencia que es la principal de la ciudad y donde mayor cantidad de destrozos y pintadas se registra en las últimas semanas.
Otra de las plazas importantes de Chascomús y que también sufrió pintadas en uno de sus antiguos monumentos es Plaza Libertad. Con el agravante de que está enfrente de la mismísima Secretaría Municipal de Seguridad Ciudadana que comandan Mariela Moscarella y Ramiro Canggianelli que parecen no haberse enterado.








El colmo fue que aparecieron pintarrajeados los monumentos luminosos del nuevo Paseo Lalín en inmediaciones del Museo Pampeano. Es decir que esto ocurrió pocos días después de haber sido inaugurado el lugar con la presencia del alcalde de la ciudad española de Lalín.
Esperemos que las autoridades encargadas de la Seguridad empiecen a cuidar el patrimonio público. Porque que cuiden la propiedad privada de los chascomunenses, también es sabido que no lo hacen.